Al igual que ocurre con las pinturas “antihumedad”, las pinturas anticondensación sirven para aislar techos y paredes. Sin embargo, puesto que su capacidad aislante es mínima y que no soluciona las filtraciones ni los problemas que originan las humedades, éstas volverán a aparecer con el tiempo.
¿Por qué se produce la humedad por condensación?
La humedad por condensación es un fenómeno físico que se produce cuando el vapor de agua del aire se transforma en líquido al entrar en contacto con una superficie fría.
Este tipo de humedad es habitual en las viviendas cuando la temperatura interior es superior a la del exterior, y se manifiesta en forma de vaho o de pequeñas gotas de agua sobre puntos de contacto como paredes, techos y ventanas; generalmente de cocinas y baños.
La humedad por condensación también provoca la aparición de moho y un fuerte olor a humedad que puede llegar a ser muy incómodo e incluso nocivo para la salud.
Las causas habituales de las humedades por condensación son:
Falta de ventilación
Cuando las estancias están cerradas durante mucho tiempo el aire estanco absorbe la humedad del aire y la acumula. Abrir las ventanas todos los días durante 10 o 15 minutos es una solución práctica y sencilla para prevenir la humedad por condensación.
Temperatura de calefacción muy alta
¿Alguna vez has notado que las humedades por condensación son más habituales en el invierno? Al encender la calefacción todos los días, y de manera constante, favorecemos la proliferación de humedad al aumentar la diferencia entre temperatura interior y exterior.
Aislamiento deficiente
Cuando una casa tiene problemas de aislamiento térmico, el frío entra y la humedad se «adhiere» a las paredes. Evidentemente, los problemas de aislamiento, que son la causa más común de las humedades por condensación, no pueden solucionarse aplicando una pintura anticondensación. En estos casos es necesario aislar correctamente la estructura de la vivienda.
Algunas acciones diarias que ayudan a evitar este tipo de humedades son:
- Secar la ropa al aire libre (nunca sobre radiadores ni en interiores).
- Poner la calefacción a temperatura ambiente.
- Ventilar el cuarto de baño tras la ducha.
- Tapar las ollas, cazuelas y sartenes cuando cocinamos.
¿Qué es la pintura anticondensación?
El objetivo de la pintura anticondensación es aumentar la temperatura de la pared rebajando el contraste con el exterior y disminuyendo la posibilidad de aparición de humedades por condensación.
La mayoría de las pinturas anticondensación tienen una base de agua e incluyen unas pequeñas esferas de materiales, como por ejemplo el vidrio, que quedan en suspensión y ayudan a «crear» huecos de aire en la pintura.
Las tres características de este tipo de este tipo de producto son:
- Evitan la aparición de bacterias, moho y hongos en paredes y techos.
- Son resistentes al agua y a la humedad.
- Son transpirables.
La aplicación de la pintura anticondensación es sencilla. De hecho, puede encontrarse en ferreterías y tiendas de bricolaje.
¿Por qué la pintura anticondensación no es una solución definitiva?
La pintura anticondensación no cumple con los requisitos de aislamiento que serían necesarios para evitar las humedades por condensación. Dicho de otra forma, ni siquiera aplicando varias capas del producto obtendremos un grosor técnicamente viable. Por lo tanto, no son una solución a los problemas de humedad.
Por otra parte, la pintura anticondensación, debido a su composición, no ofrece un acabado como las pinturas normales ni tiene su misma capacidad de absorción. Al aplicar esta pintura sobre una superficie se quedará una mancha. Evidentemente éste no es un problema grave (es simplemente una cuestión estética), pero necesitaremos varias capas de pintura para conseguir resultados homogéneos.
Termina con la condensación y las humedades de forma definitiva
La solución para eliminar definitivamente la condensación y las humedades asociadas a ella y disfrutar de una temperatura agradable en la vivienda es mejorar el aislamiento de las paredes para eliminar los puentes térmicos en la superficie de la fachada.
Las ventajas de aislar correctamente una vivienda son:
- No tendrás «fugas» de calor ni filtraciones de frío.
- Tú y tu familia respiraréis un aire más limpio y sano.
- Ahorrarás en climatización (tanto en calefacción como en aire acondicionado).
Las opciones de aislamiento para terminar con este problema son:
Aislamiento exterior con fachada ventilada
Se trata de fijar sobre la pared una capa aislante con una estructura metálica. Este sistema reduce los puentes térmicos, protege la fachada de las inclemencias meteorológicas y elimina los problemas de humedades.
Aislamiento de fachadas por inyección en cámara
Consiste en inyectar espuma de poliuretano, lana mineral o celulosa en el interior de la cámara de aire de las paredes. Los problemas de esta solución son que no garantiza la uniformidad y que será necesario reparar los desperfectos de las paredes.
Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE)
Consiste en aplicar un revestimiento aislante protegido por un mortero. Este procedimiento es muy eficaz: reduce un 70% la pérdida de calor en invierno y disminuye un 30% el calentamiento en verano.
Impermeabilización
Los sistemas de impermeabilización permiten aislar correctamente fachadas y tejados y evitar así los problemas de condensación. Dentro de estos sistemas podemos enumerar las membranas de poliuretano al agua (que garantizan una gran permeabilidad al vapor de agua y se pueden emplear en cualquier superficie de exterior), y los sistemas de impermeabilización líquida de cubiertas (reducen la transmisión de calor, evitan filtraciones y eliminan condensaciones).
En Lemara ofrecemos todo tipo de servicios de impermeabilización para mejorar el aislamiento y terminar con los problemas de filtraciones y fugas de agua a través de la envolvente.
Si quieres terminar con las humedades, pídenos presupuesto sin compromiso.